La llegada de un payaso gracioso influye más positivamente en la salud de una ciudad que veinte burros cargados de medicamentos. Thomas Sydenham
No es una pregunta absurda. No en nuestros días.
Desde hace tres décadas, el peso de la industria farmacológica en la psiquiatría biológica ha hecho que procesos que antes entraban dentro de la normalidad vital sean tratados como enfermedades mentales.
El duelo por una perdida, el estrés ocasionado por la entrega de un proyecto, la rebeldía de un niño, la tristeza por una relación finalizada, todo parece susceptible de convertirse en patológico, y por lo tanto necesitado de una prescripción médica y de su etiqueta: Depresión, TDAH, trastorno bipolar.
El autor no rechaza el buen uso de la psiquiatría biológica, pero si que critica su abuso. La psiquiatría está perdiendo de vista la diferencia entre lo normal y lo patológico.
Bajo la presión de las empresas farmacéuticas, y realizando una interpretación sesgada del DSM-5 (Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales), se generan auténticas epidemias de enfermedades mentales.
Un libro que nos advierte de las graves consecuencias de la progresiva medicalización de la normalidad. No existe ninguna pastilla que nos libere de los avatares de la vida, pretenderlo es perder una parte esencial de nosotros.
by Txema Morales. Escritor y Coach.
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